La verdad que así como no soy una gran productora de entradas en el mundo bloguero, tampoco lo soy en la vida. Tengo muchas ganas de emprender un montón de proyectos y nunca me pongo las pilas con ninguno. ¿Será esa la adolescencia de las que todos hablan? Ojala que no, que sea sólo otra faceta más de estupidez en mi vida, y no mi adolescencia tardía que espero que no llegue nunca a destino.
Esto va de la inspiración, de las cosas que ando escribiendo y que nunca termino. Cosas que tienen títulos definidos e in cambiables (?) y otras que tienen nombres de mierda y que definitivamente pienso cambiar.
Cuando empiezo a escribir (en el caso de Tómbola cuando ya escribí y ahora reescribo) busco todo tipo de información relacionada con lo que quiero escribir. Fotos, vídeos, libros, canciones, notas, todo. En esta ocasión voy a dejar varias fotos que me inspiran para escribir, imaginar y describir lugares o personas o movimientos o aspectos.
Mi querida y amada, interminable e infinita Tómbola:
Luna De Día es algo que a pocos se lo mostré, pero sin embargo está bastante en marcha. Me faltan más imágenes pero nunca tengo la oportunidad y la imaginación de buscarlas.
Opuestamente Enamorados tiene el nombre más teen y repulsivo que pudo haber salido de mi cabeza. Ésto también resulta ser como Tómbola, que fue escrito por una versión más idiota de mí y que con el paso del tiempo pudo formarse y no ser tan abismalmente idiota. Por el bien de mi existencia, será un nombre del pasado.
Y lo más actual, por ende lo que más me tiene emocionada y en vilo. Todavía sin nombre, solo con demasiadas ideas revoloteando por mi cabeza y dos nombres: Milagro y Máximo. Sí, Milagro, sin la ese al final.
Todo surgió una noche que estaba de pijama party con unas amigas y jodiendo empecé a molestar a una diciéndole que iba a escribir una historia con ella de protagonista. La broma está empezando a hacerse realidad.
Y nada, eso. Demasiada inspiración no concretada.
Sofía.
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